Alejandro Quijada, un gran campeón en ciernes

Se convirtió en Espoo en el tercer español de la historia en colgarse el oro de los 3000 obstáculos en el Europeo Sub23
Viernes, 10 de Noviembre de 2023
Emeterio Valiente
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Alejandro Quijada, campeón Europa sub23 3000m obstáculos
RFEA/Miguelez TEAM

El pasado 16 de julio escribió Alejandro Quijada una página gloriosa en la historia de nuestro atletismo al proclamarse campeón de Europa sub23 de 3000 m obstáculos, hito que valora así pasados cuatro meses: "Ahora quizás lo valoro más porque en su momento me costó asimilar lo que había conseguido. Cuando vuelvo a ver las imágenes y recuerdo los momentos vividos en Finlandia siento una gran alegría, no solo por el título, sino por lo mucho que disfruté gracias a la compañía que tuve". Ese oro continental marca un antes y un después en la siempre ascendente trayectoria del madrileño: "Siempre he confiado en mí y creía que podía conseguir grandes cosas siempre que no tuviese prisa y fuera creciendo poco a poco como atleta. Con este éxito hemos confirmado esas creencias, pero la mentalidad no puede cambiar, hay que seguir haciendo las cosas bien, con la misma filosofía, seguir mejorando poco a poco, con calma y mucha salud y quizás ahora con una motivación extra y más seguridad aún".

La circunstancia de afrontar la semifinal apenas 24 horas antes de la final, lejos de amilanarle, Quijada supo transformarla en una ventaja: "Tenía mucha confianza y sabía que podía ser uno de mis puntos fuertes el correr dos días seguidos. Desde el principio de la temporada mi entrenador Pedro García y yo tuvimos claro que el objetivo principal era este campeonato y que teníamos que ser capaces de estar en el mejor estado posible el día de la final, así que pusimos el foco en ello y trabajamos durante todo el año. Hice un muy buen invierno preparando el cross, lo que me dio una muy buena base, corrí el 3000 en el Nacional Absoluto de pista cubierta, que fue una especie de test corriendo semifinal y final dos días seguidos, y en el Europeo me limité a guardar lo máximo posible en la semifinal y utilizarla a modo de activación para la final".

Alejandro Quijada, campeón Europa sub23 3000m obstáculos - carrera

El altísimo nivel del fondo patrio volvió a provocar la paradoja consistente en que Alejandro fue campeón de Europa apenas dos semanas después de ceder en el Nacional Sub23 de Tarragona ante Pedro García Palencia: "Esperaba hacerlo mucho mejor allí y por qué no ganar, aunque nunca se sabe. También esperaba encontrarme mucho mejor, pero no fue el caso, no tuve el día y me encontré bastante pesado; además, Pedro corrió muy bien y de manera muy inteligente. Creo que ese bajo rendimiento me vino muy bien como un toque de atención para no despistarme y poner la atención plenamente en el Europeo".

En tierras finlandesas le esperaban desafiantes rivales como el portugués Etson Barros, acreditado en 8:22.20 y el propio García Palencia, pero su mentalidad no se vio alterada y siguió pensando en grande: "El objetivo principal en esas dos semanas era recuperar sensaciones y energía, dejar atrás los pensamientos negativos y disfrutar lo máximo posible, sabemos que así rindo mejor. Sí que buscábamos subir al podio, pero no hubiera firmado un bronce pudiendo luchar por algo mejor".

Quijada resume cómo se fraguaron esos épicos 8:28.91, marca personal por ocho segundos: "Ya calentando tuve buenas sensaciones de energía, el camino hasta allí había sido largo y tenía muchísimas ganas de salir a correr. Tenía la intuición de que la carrera iba a salir rápida, así que cuando así fue me mantuve tranquilo y poco a poco fui colocándome más adelante, aunque con algún tropiezo que otro. Cuando quedaba una vuelta sentí que tenía mucha fuerza y que era el momento de moverme, además vi a mi compañero Pedro que también estaba haciendo un carrerón. Fue en los últimos 300 metros cuando vi el hueco y empecé a creérmelo; como me había dicho mi entrenador, si decidía cambiar tenía que ser hasta el final y sin miedo. Así lo hice y por suerte todo fue bien, excepto la desafortunada descalificación de Pedro pese a su tremenda actuación".

Detrás de un gran atleta emerge incuestionablemente la figura discreta y callada del entrenador, siendo el suyo el epítome de ambas cualidades: "El trabajo que realiza Pedro tanto en la escuela de Fuenlabrada como a nivel federativo me parece excepcional. Lo hace desde la humildad y de manera muy generosa, con una visión pedagógica y centrada en la calidad de la enseñanza que es muy acertada. Creo que es una suerte haber coincidido y compartido con él desde pequeño porque me ha enseñado infinidad de cosas y sigue guiándome hoy".

Alejandro Quijada, campeón Europa sub23 3000m obstáculos con Pedro García

El abrazo en el que se fundieron mentor y campeón en la zona mixta de Espoo fue una instantánea épica, unos segundos de oro: “Lo viví con un sentimiento pleno de agradecimiento hacia Pedro, que es quien me ha formado en el atletismo y en la vida desde que a los seis años empecé a jugar en la Escuela Municipal de Atletismo de Fuenlabrada. En ese abrazo también estaban Inés Jiménez, Ana Barrenechea y toda la gente de la escuela con la que he compartido y comparto tantos momentos".

Dicen que la experiencia es un grado y seguramente el quinto puesto que cosechó como sub23 de primer año en el Europeo de Tallin hace dos años supuso la primera piedra de su colosal oro de 2023: "Sin duda fue un aprendizaje muy importante al ser mi primer campeonato individual de pista, fue la primera vez que hice semifinal y final en 3000 obstáculos y fue la primera vez que me vi tan cerca de un podio a nivel europeo. En Espoo todo fue bastante parecido a Tallin, ya conocía a los rivales, ya sabía cómo eran unas semifinales y había aprendido la importancia de guardar para la final".

La nómina de obstaculistas españoles medallistas en grandes campeonatos a lo largo de la historia es generosa, pero a la hora de nombrar a un referente salta la sorpresa: "En la escuela de Fuenlabrada siempre he tenido como referencia la figura de José María (Chema) González Calvo que fue un gran obstaculista entrenado también por Pedro y que corrió en 8:22.16 en el año 99. Mi triunfo en el Europeo me motiva para acercarme poco a poco a lo que los grandes especialistas españoles consiguieron en el pasado".

Lejos de ser el típico obstaculista que desciende sobremanera su rendimiento cuando permuta a cualquier otra disciplina, Alejandro ha demostrado un talento innato para el 1500, modalidad en la que ya marcó 3:46.94 como sub20, preludio de unos más que interesantes 3:38.08 el verano pasado en su única incursión sobre la distancia: "La verdad es que el 1500 me parece una prueba muy divertida y le saco bastante rendimiento para las pocas veces que la corro, por lo que podría tener un gran margen de mejora, pero en los obstáculos me siento muy cómodo y me gustan mucho. Eso sí, sin dejar de lado al 1500 para seguir mejorándolo y quién sabe si algún día llegando al nivel como para plantearme hacer como Pol Oriach, por ejemplo".

Disecciona Quijada a continuación su plan de preparación: "Es un entrenamiento muy normal pero de gran calidad y siempre adaptándonos a cómo me encuentre. Depende mucho del momento de la temporada en el que estemos, pero solemos hacer seis días de entrenamiento a la semana con algún día de doblaje. Los kilómetros suelen estar en torno a los 100, hacemos más o menos tres días de series, dos días de rodaje más circuitos en el gimnasio y un día de rodaje largo. Nos gusta mucho movernos en todo tipo de terrenos, no solo pista, y le damos un gran valor a la técnica de carrera y de vallas".

Entre su entrenador y su máximo contrincante sub23 a nivel nacional, Alejandro tiene el nombre de Pedro García grabado a fuego: "Pedro es un gran amigo y debido a esa coincidencia ya hemos vivido varias anécdotas por la confusión, pero siempre nos las hemos tomado con humor y tenemos muy buena relación entre los tres".

Nos detalla ahora sus inicios y en qué momento de su ya dilatada carrera atlética se decantó por el 'steeplechase': "Fue mi profesor de Educación Física el que me invitó a correr en la carrera de Fuenlabrada y allí fui con seis años, me gustó la experiencia y mis padres me apuntaron a la escuela que había. A partir de ahí empecé a jugar y a probar de todo, íbamos a las competiciones y corríamos, saltábamos y lanzábamos. En mi primer año de cadete [sub16] hice combinadas, aunque yo quería irme ya al grupo de fondo que era donde estaba mi hermano Pablo, pero Pedro quiso ser paciente para que desarrollara todo tipo de habilidades. En cadete de segundo ya me cambié, y seguí probando un poco de todo hasta que poco a poco me fui especializando en fondo y mediofondo y como en combinadas había hecho vallas en los obstáculos me defendía más o menos bien".

En el siempre arduo ejercicio de autoanálisis, Alejandro comenta: "Creo que todavía estoy en proceso de moldearme como obstaculista, me muevo bien encima del obstáculo y tengo bastante fuerza para solventar los pasos, pero puedo mejorar en ciertos aspectos, que en una prueba larga como los obstáculos puede suponer una gran mejora en cuanto a marca. A nivel de técnica de vallas creo que estamos realizando un muy buen trabajo gracias a Ana Barrenechea, puede que sea mi mejor cualidad, y creo que correr más en el 3000 lisos me ayudará a sentirme más a gusto en los ritmos de los obstáculos".

A finales de octubre, Alejandro firmó una espléndida actuación en el Cross de Atapuerca, lo que hace barruntar una gran prestación en su última competición como sub23: "El Europeo de Cross de Bruselas es el principal objetivo de este invierno para despedirme de las categorías menores con un buen sabor de boca. Espero clasificarme y en ese caso no hay que conformarse solo con ir, estaré dispuesto a dar todo lo que pueda a nivel individual, pero sobre todo para sumar lo mejor al equipo, que en mi opinión tiene mucho que decir todavía".

Alejandro Quijada, campeón Europa sub23 3000m obstáculos Medalla

Tras la cita belga emergerá el debate de todos los inviernos entre seguir con el cross o preparar la pista cubierta. "Todos los años nos planteamos Pedro y yo esta misma pregunta y llegamos siempre a la misma conclusión: el cross es una magnifica herramienta que nos permite crear en invierno una muy buena base y cimientos para construir sobre ella el aire libre, así que seguiremos con nuestra filosofía, pero sin perder la oportunidad aun así de correr algún 3000 en cubierta para tocar todo tipo de intensidades".

Todo queda en casa, debió de pensar Alejandro cuando fue seleccionado, junto a su hermano Pablo, para disputar el relevo mixto del Mundial Universitario de Cross en Aveiro (Portugal) el año pasado, con Marta Serrano y Mireya Arnedillo completando el cuarteto: "El relevo mixto me parece muy interesante, y si a eso le sumas estar con tu hermano en el equipo, y encima ganar un bronce, se convierte en un recuerdo inolvidable. Además, al ser el campeonato en Portugal mis padres pudieron vernos y fue muy bonito compartir esa experiencia en familia".

Como en Espoo, Alejandro deja lo mejor para el final y vaticina un año repleto de grandes emociones sin renunciar a los más prestigiosos eventos: "Es un año muy ilusionante con Europeo en Roma y Juegos Olímpicos en París, así que vamos a tratar de hacerlo lo mejor posible y a ver adónde podemos llegar". Confía también en una mejora cronométrica que le lleve por debajo de los 8:20: "¿Por qué no? Creo que no tengo que cerrarme ninguna puerta y puedo mejorar mucho todavía". Ya sobre los cuadros de meta, remata Quijada con el objetivo global de su carrera: "Ser olímpico es el gran objetivo, pero no de cualquier forma: si consigo serlo, sentirme competitivo en ellos sería muy importante y a nivel europeo, ¿por qué no conseguir el oro absoluto para colocarlo junto al sub23 de este año?". El que avisa no es traidor.

En el mundial Universitario de cross 2022