Bruno Hortelano, uno de los mejores velocistas españoles de la historia, anunció hace unos días su retirada de la alta competición.
Bruno Hortelano (Wollongong, Australia, 1991) no tardó en mostrar su potencial desde muy joven. Formado en España desde niño y posteriormente completando parte de su desarrollo deportivo en Estados Unidos, destacó desde categorías menores y ya apuntaba a convertirse en uno de los mejores velocistas continentales.
Su irrupción internacional se consolidó en los primeros compases de la década de 2010 con su participación en el Mundial Junior, y no tardó en dejar huella en la escena europea. Sin embargo, sería en julio de 2016, en el Campeonato de Europa de Ámsterdam, donde Bruno firmó uno de los hitos más importantes del atletismo español: la medalla de oro en 200 m, convirtiéndose en campeón de Europa con una actuación memorable. Con su habitual estilo elegante y explosivo se impuso en la final con autoridad, haciendo historia como el primer español en lograr esa corona continental en velocidad. Ese mismo verano compitió en los Juegos Olímpicos de Río 2016, confirmando que España tenía en él a uno de los grandes referentes de la velocidad europea y mundial.
Pero el destino le tenía preparado un duro revés. En septiembre de 2016, apenas semanas después de su gesta en Ámsterdam, un grave accidente de tráfico le provocó severas lesiones en la mano derecha y otras complicaciones físicas que pusieron en riesgo no solo su carrera deportiva, sino su vida. El impacto emocional fue enorme, tanto en el entorno del atletismo como en el conjunto del deporte español. Muchos habrían pensado en la retirada definitiva. Bruno, sin embargo, eligió otro camino.
Con paciencia y esfuerzo, protagonizó uno de los regresos más emocionantes de nuestro deporte. No solo volvió a entrenar; volvió a competir. Y no solo a competir, sino a ganar y a volar más rápido que nunca. En 2018, firmó un nuevo hito: el récord de España de 400 m, con un registro de 44.69, que aún hoy permanece imbatido. Un récord que demuestra su capacidad para reinventarse tras la adversidad y afrontar nuevas distancias.
A lo largo de su carrera, Bruno ha establecido y mantenido hasta día de hoy tres récords de España al aire libre:
- 100 metros lisos: 10.06 (2016)
- 200 metros lisos: 20.04 (2016)
- 400 metros lisos: 44.69 (2018)
Más allá de las marcas y medallas, Bruno deja una impronta profunda por lo que ha significado para el atletismo español: un ejemplo de resiliencia, profesionalidad, humildad y amor por el deporte. Ha sido inspiración para miles de jóvenes que vieron en él no solo un campeón, sino una historia de lucha y superación.
En los últimos años, tras nuevos desafíos físicos y personales, Bruno ha ido tomando distancia de la competición. Pero lo ha hecho sin perder nunca el vínculo con el atletismo, participando en acciones de divulgación, apoyo a categorías menores y compartiendo su experiencia con las nuevas generaciones.
Gracias, Bruno, por tu entrega y por haber representado a España de la mejor manera posible.
HISTORIAL DEPORTIVO DE BRUNO HORTELANO