Se clasifican para la final, igual que los hombres del relevo largo, las mujeres del 4 x 100 y Fátima Diame en longitud.
A nuestras chicas del 4 x 400, inminentes olímpicas, les asignaron la segunda de las dos semifinales. El sistema de acceso a la final (miércoles, 21:19): tres primeras y los dos tiempos más rápidos. El orden elegido fue Carmen Avilés, Berta Segura (la única que estuvo en la prueba individual), Eva Santidrián y Blanca Hervás. Recordad ese orden cuando toque recitar de memoria a las plusmarquistas nacionales, que devoran el registro conseguido en el Mundial de Bahamas, 3:27.30, dejándolo en 3:25.25. Entonces el récord iba para 33 años, esta vez tenía apenas cinco semanas. Los parciales: 52.45, 50.76, 51.39 y 50.65 (Blanca muriéndose literalmente en la recta por alcanzar la cuarta posición y ser las primeras en meterse por tiempos). Esto de que los relevos de España Atletismo no se cansen de hacer historia es una preciosa costumbre.
¿De qué planeta vinieron?
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Las “Spanish Bubbles” están haciendo historia 🚀
📹¡Y quieren más! @carmen_avilees 🤝 @bertaseguura 🤝 @evasantiru 🤝 Blanca Hervás #EspañaAtletismo #PasiónPorCompetir pic.twitter.com/BAqZk3SEpb
Los chicos del relevo largo accedieron a la final por tiempos al ser quintos en la segunda semi con 3:01.45, su mejor prestación este curso. Un despliegue de fuerzas y coordinación muy bien compensado con la primera puesta de Iñaki Cañal (45.40), la segunda de Manuel Guijarro (45.10), la tercera de Óscar Husillos (45.28) y el remate del adolescente David García Zurita, que combatió el ácido láctico y la presión por conducir a meta como si llevara dos décadas en las pistas… y no las lleva ni en el mundo (tiene 19 años). La final aguarda mañana, última sesión del campeonato, a las 21:19.
Iñaki declaraba en zona mixta: “Objetivo cumplido, pase a la final y mañana a luchar por todo. Se ha corrido un montón, mucho más que hace un par de años. En cámara de llamadas nos dijimos que teníamos que estar delante, hacer marca de la temporada, y con eso tendremos el pase prácticamente a la final. Ha hecho falta un poquito más y sufrir hasta el último segundo. Mañana habrá mucha igualdad entre todos los equipos y estará muy abierto”. Manu recogía el testigo, esta vez con la voz: “Una carrera impecable, Iñaki me ha entregado muy adelante, era la estrategia de carrera, coger calle libre de los primeros. Si nos querían adelantar que lo hiciesen, pero ya en curva o en última recta, abriéndose. El pase ha estado más caro que otros años, con esta marca otros años estás peleando por las medallas, aunque mañana vamos a tener que correr un poco más y tenemos potencial de sobra para hacerlo”. David también estaba radiante: “Muy contento con el equipo, un marcón, mañana otro horario, una carrera distinta y, por qué no, una mejor actuación y a soñar con las medallas”. El último en hablar fue el más veterano de un equipo que ha sido tercero y cuarto en los dos últimos campeonatos de Europa. Óscar Husillos: “Poco más que añadir. Nos hemos encontrado bien y creo que podemos estar luchando por todo. Puede que haya selecciones más potentes, pero en carrera puede pasar cualquier cosa”.
Las mujeres del relevo corto, las que saben lo que es ser quintas del mundo y cuartas de Europa, corrieron en la primera de las dos semis. Formaron con Sonia Molina-Prados, Esther Navero, Paula Sevilla y Maribel Pérez. Y sucedió lo de casi siempre: no fallaron. Tercera plaza, clasificación directa con 43.00 y presencia asegurada en la penúltima carrera del Europeo Roma 2024 (mañana a las 22:40). Cambios bien engrasados y sensación de no tener miedo absolutamente a nadie. La sombra del Plan Nacional de Relevos es alargada y su trabajo silencioso está propiciando la edad de oro de nuestro atletismo en lo que a pasarse ‘el palo’ se refiere.
Mientras todo esto sucedía, a dos metros sobre él óvalo saltaban Fátima Diame (grupo A) y Tessy Ebossele (grupo B) en la calificación de longitud. Pedían 6.70 (o al menos las 12 mejores marcas) para el pase directo a la final (mañana a las 20:54) y Fati lo firmó a la tercera tras dos intentos de 6.50 y 6.28. Al término del concurso reconocía que “me ha costado un poco entrar en competición, la tarima no es muy afín a mi manera de correr, pero al final le he cogido el timing y he hecho Q. Iván me dijo que hiciera eso y es lo que he hecho, así que contenta”.
Su compañera a las órdenes de Pedroso tuvo más problemas y estableció una serie de 6.47, 6.37 y 6.37 que no le permitió pasar del 19º puesto del global: “Como palabra del día, chasco. Pero bueno, realmente esta competición es una motivación para seguir adelante porque quieras que no es un Europeo y tampoco quiero quitarme mérito porque esta temporada me ha costado tanto anímica como físicamente. Llegar hasta aquí es algo que me enorgullece y es algo que me sirve de motivación. Hoy a comer pizza y ya mañana ensalada”.
Saltó Daniela García al mar azul de tartán sabiendo que la clasificación para la final de los 800 metros sería por puestos o no sería. Le tocó la última de las dos semifinales y, en la primera, Keely Hodkinson, enésima demostración de superioridad, aceleró la marcha hasta detenerla en 1:58.07 y dejar el tiempo de corte en 1:59.43 (pasaban las tres primeras y los dos mejores cronos del global). Daniela reconocía después que “ninguna de las de mi serie podíamos aspirar hoy a ese tiempo”. Así que luchó por llegar en el trío cabecero con una estrategia que a la postre no reportó frutos. De atrás hacia adelante (“fui la última, Antonio me va a matar porque me dijo que no fuera tan atrás, pero es que no puedo salir más rápido”), confiada en haber repuesto fuerzas después de su tremenda semifinal y a la espera de poder remontar posiciones en el latigazo final. Progresó, pero no pudo pasar de la quinta plaza (2:00.68, a muy poco de su marca personal, 2:00.43, batida hace menos de un mes).
Gran Europeo para la campeona de la cita en versión sub 23: “Muy contenta porque el año pasado en el Mundial de Budapest no conseguí pasar de ronda y este estoy súper satisfecha porque darte la oportunidad para correr una carrera más es un regalo para nosotras como atletas. Hoy era eso, una ocasión más para demostrar mi trabajo. He cumplido, pero es verdad que me quedo un poco con la espinilla. Tendré que esperar, porque para mí llegar a la final de un campeonato internacional es súper importante y tengo muchas ganas de lo que viene”.
No estará en la final el relevo masculino de 4 x 100. Ricardo Sánchez, Abel Alejandro Jordán, Juan Carlos Castillo y Sergio López clasificaron cuartos en la última de las dos semifinales (pasaban los tres primeros y los dos cronos más rápidos) con 39.21, mejor marca de la temporada pero 10ª del global, a 11 centésimas del tiempo de corte.
Piden paciencia, piden confianza.
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Es su primera carrera juntos.
La velocidad española tiene mucho futuro y esto es solo el principio.
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En la calificación de la jabalina, donde Manu Quijera estaba encuadrado en el grup A, pedían 82 metros para obtener el pase directo a la final de mañana (20:28) o al menos estar entre los 12 mejores tiros. El navarro, último español en competir en la jornada, comenzó con un nulo. En el segundo envió el dardo a 75.38. El tercero no fue más largo (75.61) y con él se esfumaron las posibilidades de llegar más lejos.