
El 17 de junio de 2025 falleció en Madrid Jesús Hurtado. Era el atleta internacional español más anciano, y más antiguo, pues había nacido, también en Madrid, el 23 de noviembre de 1928, y debutado con la camiseta de España en 1954. Su trayectoria atlética se centró en las carreras de medio fondo y fondo, tanto en pista, como en cross y ruta.
Él mismo contaba que comenzó a correr en el servicio militar, a los 20 años. Su aparición en el atletismo a nivel nacional se produjo en 1953, con sus resultados en junio en Mieres, tanto en 5.000 como en 10.000 metros, con unas marcas de 15:38.9 y 32:13.8. En 1954 ya estaba en el primer nivel nacional. Fue subcampeón de España en 5.000 y 10.000 metros, con registros de 15:39.2 y 32:37.6, en ambas pruebas por detrás de Antonio Amorós, a quien siempre consideró como el corredor más destacado con el que se enfrentó en su época más importante. Ese verano se produjo su estreno en el equipo español, en el encuentro frente a Francia que se celebró en Anoeta en agosto, que se saldó con un aplastante triunfo francés, y terceros puestos para Hurtado tanto en 5.000 como en 10.000. Sus marcas aquel año mejoraron hasta 14:59.0 y 31:21.4.
En 1955, mientras Amorós volvía a ganar el nacional en 5.000 y en 10.000, Hurtado queda cuarto en la prueba corta, y de nuevo subcampeón en 10.000, con 15:23.6 y 31:22.6.
1956 lo llevó por primera vez al Cross de las Naciones, con un modesto puesto 52. En la pista, seguían mejorando sus marcas en los Campeonatos de España, con 15:17.2 y 31:08.0, aunque solo logró los puestos quinto y tercero. Vuelve al equipo nacional en el encuentro frente a Sarre en mayo, quedando segundo tras Amorós. A nivel de marcas ya era el segundo de España en 5.000, con 14:44.0, y tercero en 10.000, con 31:08.0.
Vuelve al Cross de las Naciones en 1957, mejorando de puesto hasta el 43, por lo que ya puntuó con el equipo. Este fue sin duda su mejor año en los campeonatos de España. Ausente Amorós por razones médicas, y ante un panorama nada claro, Hurtado logró ganar ambas pruebas, los 5.000 con 14:42.0 por delante de José Molins, y los 10.000 con 30:55.2 con Luis García segundo. Esta última fue su mejor marca del año, segunda de España; mientras mejoraba en las demás pruebas, hasta 3:54.9 (tercero nacional), 8:27.4 (quinto) y 14:41.4 (sexto). Mucha actividad internacional aquel año ganó los 5.000 en el encuentro frente a Francia Sur, fue tercero en la misma prueba frente a Alemania, y quinto en 1.500 y tercero en 5.000 en un triangular ante Bélgica y Portugal.

En 1958 comenzaban a llegar nuevos fondistas a la cúspide española. En el Campeonato nacional solo pudo ser cuarto en 5.000 y tercero en 10.000, aunque en esta prueba mejoraba su marca hasta los 30:19.6, marca que lo colocó tercero en la lista nacional, tras Antonio Amorós y Carlos Pérez. Siguió representando a España en los encuentros internacionales: fue quinto en 5.000 en un triangular frente a Bélgica y Dinamarca, en el estadio bruselense de Heysel.
El año 1959 se despidió del Cross de las Naciones, con el puesto 38, el cuarto del equipo español como en 1957. En los Campeonatos de España acortó las distancias: fue cuarto en 1.500 y sexto en 5.000. El panorama internacional lo llevó a Viena, donde compartió con José Molins el doblete en 5.000 metros frente a Austria, y a Anoeta, otro doblete junto a Tomás Barris frente a Portugal, este sobre los 1.500 metros. Su marca sobre 1.500 metros mejoró aquel año hasta los 3:51.6, tercero de España. En 5.000 fue quinto de la lista, con 14:41.0.
En 1960 estrenó un nuevo ámbito de la actividad atlética. Se estaba empezando a desarrollar el atletismo en pista cubierta, y en Lisboa se organizaron unas pruebas en el Pavilhao da Feira das Industrias Portuguesas. Allá marchó Hurtado, y el día 21 ganó los 2.000 metros, estableciendo la primera mejor marca española, con 5:27.8, registro que se mantendría hasta 1966 cuando lo mejoró Fernando Aguilar. Dos días después ganó los 3.000, con una marca de 8:38.8, que se mantuvo como la mejor española hasta que la batió Mariano Haro en 1964. Este año logró dos podios en el Campeonato de España: segundo en 1.500 metros tras su amigo del alma para toda la vida, Julio Gómez Almazán, y tercero en 5.000, derrotado por José Molins y Fernando Aguilar. Un encuentro internacional más aquel año, triangular frente a Suiza y Francia B, en el que corrió los 5.000 metros. A nivel de marcas, aquel año consiguió 3:53.0 (cuarto de España), 14:24.4 (tercero) y 30:17.6 (tercero).
En los Campeonatos de España de 1961 solo compitió en los 10.000 metros, con un último podio al quedar tercero tras José Molins y Mguel Vidal. También este año vio la despedida de Hurtado del equipo nacional. En el encuentro frente a Austria en Barcelona, el 24 de septiembre, cuando quedó segundo en los 1.500 metros con una marca de 3:58.1, seguido a una décima por Julio Gómez Almazán. Todavía seguía a primer nivel nacional en cuanto a marcas. Lo mejor aquel año fueron los 31:06.8 en 10.000, cuarto en la lista española.
Una nueva generación ha llegado ya a las pistas. En 1962 Mariano Haro se proclama campeón nacional en 5.000 y 10.000 metros: en ambas pruebas compite Hurtado, que queda séptimo y sexto, respectivamente. Y en 1963 se limita a la prueba larga, ganada por Fernando Aguilar, y en la que queda octavo en su despedida de los Nacionales en su décima participación consecutiva.

Parecería que había terminado la historia atlética de Jesús Hurtado. Pero no, le quedaba una cosa que ha sido muy significativa en el recuerdo que ha dejado. Faltaba un ámbito atlético que justo entonces comenzaba poco a poco y ahora ha alcanzado una enorme importancia: la ruta. Y ahí, Hurtado fue el vencedor en las dos primeras ediciones de una prueba ahora importantísima: la San Silvestre Vallecana, que ganó en 1964 y 1965.
De este modo se completó una carrera completa que tocó todos los palos: la pista, el cross, la naciente pista cubierta, y los inicios de la ruta.
Descanse en paz Jesús Hurtado, el decano de los internacionales españoles, que se estrenaba con la camiseta española hace nada menos que 71 años.