Lorea Ibarzabal y Lorena Martín (800), Mario García Romo (1500) y Jesús David Delgado, Sergio Fernández y Daniela Fra (400 metros vallas), apeados del Europeo.
Por Adel Mechaal pasan los kilómetros, el ansia competitiva, el verbo sin filtro. El sudor y la agonía. La necesidad compulsiva de triunfos. Lo que no pasa por él es el tiempo. Lo vimos en la final de 5000, hace dos días, y lo hemos vuelto a ver esta mañana durante la primera de las dos seminales del ‘milqui’. Llegan nuevos atletas, más jóvenes, incluso con mejores marcas, pero cuando se trata de bajar al barro, de emplearse cuerpo a cuerpo, cuando no hay liebres ni fijos de salida, cuando solo consiste en llegar antes a meta, su figura se agiganta sin freno.
Se movió cuando el ritmo era exageradamente lento como para fiarlo todo al sprint final. Aclaró el panorama y, en la recta, siempre posicionado en plazas de privilegio (pasaban a la final del miércoles a las 22:26 los seis primeros de cada carrera), pegó el último arreón hasta situarse cuarto con 3:44.19. En esa amalgama de piernas moviéndose aceleradamente (nueve atletas entraron en el mismo segundo) estaban las de Mario García Romo, bronce en Múnich hace dos cursos, que se quedaron a unas míseras 11 centésimas de alcanzar el pase (7º, 3:44.30).
Adel lo analizaba de esta manera: “Una nueva final donde intentaremos pelear para estar lo más arriba posible. Ha sido una carrera bastante lenta al principio, veía que los metros iban pasando y nadie tomaba la iniciativa, así que a falta de 600 he decidido arrancar como si no hubiera mañana e intentar llegar al último cien en cabeza, aguantar y entrar entre los seis primeros. Así ha sido una ejecución perfecta, puede parecer fácil pero es bastante complicado”.
Mario se mostraba “triste por un resultado que no esperaba, creo que merecía un pelín más porque me estaba encontrando muy bien. Simplemente quiero volver a casa y seguir entrenando para el Campeonato de España y hacerlo lo mejor posible en La Nucía y luego en los Juegos. Esto es el deporte, no refleja el estado de forma en el que estoy pero hay que asumir todo”.
Tampoco pudo alcanzar su objetivo Ignacio Fontes, encuadrado en la segunda carrera, el jardín de recreo de Ingebrigtsen, que sabiéndose clasificado antes de empezar es incapaz de aplacar su obsesión por la victoria y, sin nada ya en juego, mete el pecho para que el italiano Federico Riva no pueda contarle a sus nietos que él, en una ronda preliminar de un Campeonato de Europa, llegó por delante del gran Jakob. Todo esto no lo vio el granadino, ligeramente por detrás, enfrascado en la lucha por una clasificación que no puso permitirse debido a su séptima plaza (3:39.02), que le dejó “un poco decepcionado, o triste, por no haber pasado de ronda. Ese era el objetivo del campeonato, estar en la final. La carrera ha sido un poco rara. No he sentido que estuviera mal colocado, aunque es cierto que estaba un poco cerrado, pero confiaba en que se abriese. A falta de 500-600 metros, cuando me he dado cuenta estaba último. He visto a Ingebrigtsen y he pensado que, si estaba allí, de alguna forma iba a tirar hacia adelante, así que no me he puesto muy nervioso. A falta de 400 iba a empezar a moverme, pero ha habido una caída justo enfrente. Creo que no me ha lastrado mucho, no sé sí habrá sido por eso, pero en los últimos cien metros no he conseguido dar un poquito más y me he quedado a dos décimas de la final. El 1500 es así, el nivel en Europa es muy alto y debes estar al 110%: vuelta a al trabajo y a seguir”.
[Tras una reclamación realizada por la delegación española, Ignacio Fontes ha sido recalificado y correrá la final de 1500 m]
Las chicas del 800 gozaron de suerte dispar. Daniela García, campeona sub 23, tomó papel protagonista en la cuarta y última de las series de clasificación, comandó la carrera, niveló la balanza hasta el plano que le convenía y obtuvo el premio de una tercera plaza crono de 2:00.70. La suya fue la carrera más rápida, aniquilando las posibilidades de pasar a semifinales (mañana a partir de las 10:10) de Lorea Ibarzabal, que aguardaba el desenlace en la silla caliente tras haber sido quinta en la primera con 2:01.70 (accedían los tres primeros puestos y los cuatro mejores tiempos); pasó la cuarta, la polaca Angelica Sarna, 2:01.09. Su compañera de entrenamientos, Lorena Martín, tampoco podrá estar en la siguiente ronda tras firmar una buena recta en la que fue sobrepasando rivales hasta que no pudo progresar más allá de la cuarta plaza (2:02.21).
Así de contenta se manifestaba Daniela: “Me he encontrado especialmente bien, la verdad, sabía que tenía que correr mucho en la última serie, así que he decidido ser valiente y salir a ritmo. He visto que la carrera se paraba y entonces he espabilado para seguir marcando mi ritmo, pasar por debajo del minuto, luego uno quince, uno treinta y dar lo que tuviera en el último 50 que ha sido para caerse al suelo. Lo he dado todo, a ver cómo me encuentro de cara a mañana. A ver cómo recupero, pero van pasando los años y ya tengo cierta madurez atlética, así que espero que mis piernas respondan”.
Lorea consideraba que había “corrido bien, colocada por dentro y en las primeras posiciones, pero el último 50 no lo tenía no sé muy bien por qué, no tengo ninguna razón o explicación. Sólo queda seguir trabajando, me he quedado a un puesto de entrar en semis y la verdad es que me da muchísima rabia”.
Lorena se sinceraba también zona mixta: “La verdad es que no puedo estar decepcionada. Claro que quería estar en semis y luchar por la final pero tengo que estar orgullosa por una vez. Suelo ser muy autocrítica pero he luchado mucho este verano para estar competitiva, y lo estoy, aunque no vaya a estar en la semifinal. Vamos a seguir currando este mes para seguir dándolo todo y estar en mis mejores marcas. Hay mucho que mejorar y creo que estaremos a tope a final de mes”.
Antes, inaugurando para España Atletismo la sexta jornada en el Olímpico, dio media vuelta al óvalo azul Esperança Cladera. Registró 23.42 (el último tiempo de los 12 que pasaban) para ser quinta en la tercera serie de la ronda previa de los 200 metros y estará junto a Jaël-SakuraBestué y Paula Sevilla en las semifinales de esta tarde (a partir de las 21:05).
Los últimos en competir fueron nuestros chicos y chica de las vallas bajas. Sergio Fernández, el subcampeón de 2016, logró su mejor marca de la temporada (49.34, co-líder español del año) para ser quinto en la segunda de las tres semifinales. Pasaban los dos primeros de cada una más los dos mejores tiempos, así que tampoco disputará la final Jesús David Delgado, séptimo en la última con 49.38. Daniela Fra no pudo revertir la tendencia y acabó octava con 56.27: “Estoy contenta por la marca personal de ayer, sé que esto me sirve de experiencia para el futuro”.
Tampoco estará en la final de jabalina la debutante (en el Europeo y con España Atletismo) Yulenmis Aguilar, que fue 5ª en el grupo B de la calificación con una serie de 54.89, 57.27 y nulo. Pedían 60.50 o al menos las 12 mejores marcas de los dos grupos: la suya fue la 13ª. Compungida y decepcionada nos contaba: “Ha sido muy bonito competir con la camiseta de la Selección pero a nivel de resultado no fue lo mejor. Feliz de poder estar aquí pero me voy triste de no poder representar esta camiseta como se merece. Caí enferma, cuando llegué a Roma tuvo tres días de fiebre y además sigo recuperando una lesión de hombro. A seguir preparando los Juegos Olímpicos, que es lo más importante de la temporada”.